domingo, 21 de diciembre de 2008
Risoterapia
Pienso en ti y me mareo. Me acomodo en el rincón chill a la luz de la lámpara de sal y el tintineo de las velas repiquetea en mis párpados cerrados. Siento un balanceo tenue encima de los cojines y la sensación de estar en un sueño cálido, acurrucada y relajada me inunda. Huele a incienso. Sonrío, al notar la percepción del espacio-tiempo un tanto desacompasada. La sonrisa lleva a la risa, por todo lo que veo, por las formas de las sombras, por la sensación de la temperatura en mi propia ropa, por cualquier cosa, por todo otra vez, por reírme por todo, por verme a mí misma riéndome, por la cara de la gente, porque también se ríen de algo que ves a saber qué será, pero que vaya caras al reírse. Y ya no estoy mareada, aunque siga pensando en ti, porque también me das risa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario